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martes, 6 de diciembre de 2016

El llamado de la piedra

Emprendimos una nueva etapa donde la llave esta en nuestras manos pero para poder abrir esa puerta  comenzamos a cerrar ciclos,
 Surge la necesidad de viajar y nuestro destino se centra en un lugar  donde hallar silencio, quietud y que  la vida fluya como el rió, así sin esperar nada.
  Este   viaje tuvo como destino la provincia de córdoba, mas especialmente capilla del monte pueblo de magia y descubrimiento, fuimos por dos motivos, uno para dar un final al libro que veníamos diseñando tiempo atrás,al que le  faltaba  un golpe de horno,  este lugar era ideal para poder  continuar con el aprendizaje.




Nuestro lugar de anclaje fue el camping del peregrino Sin conocer bien su historia reservamos un lugar para dormir. Hoy debo decir que no nos equivocamos al elegirlo, con anterioridad estuvimos en febrero en un encuentro de Ricardo Gonzales , en ese lugar logramos hacer contacto con una piedra de allí que se apoyaba a la orilla de una acequia cuya parte posterior era bañada por el agua estrepitosa que bajaba de los cerros.





La entrada al camping se encuentra precedida por la bandera de la paz




En nuestro primer día, fuimos recibidos por Carlos Alberto Gallo y su esposa Andrea, personas de una gran calidad humana y espiritual y pudimos conocer a Mario Frontera Tulián, descendiente y representante de la tribu de los comechingones, quien se encontraba en el lugar para presidir un bautismo ceremonial de consagración.

video: https://youtu.be/esm4VAcmU94



Durante la tarde, irradiados por la energía del lugar, tuvimos una visita muy particular, el escritor y periodista Roberto Villamil, discípulo y amigo de Ängel Cristo Acoglamis, quien compartió una linda charla con nosotros, donde intercambiamos nuestras visiones respecto a este nuevo tiempo donde las almas comienzan a confluir.
Gratamente, pudimos compartirle y obsequiarle nuestro libro.


Más tarde, pudimos compartir con Mario, donde le preguntamos acerca de la palabra,"ungido", si le resonaba, donde nos cuenta, que es una información que no se encuentra en google ya que fue transmitida oralmente por generaciones nos relata que los españoles nombraron a su tribu como los comechingones, ya que era una palabra que sonaba muy similar a su grito de guerra, pero que verdaderamente, el nombre de su tribu eran "los ungidos".

Seguido a esto, compartimos nuestra conexión con respecto al agua y nosotros le transmitimos  el mensaje de que la llave estaba en el agua y el asintió, nuestra información ya que en este momento era de vital importancia para él, comprender y profundizar con respecto a este tema.
Por último y sin querer abusarnos de una trascendencia de mas de 800 años de historia, nos surgió la pregunta acerca de las semillas originales, ante esto, el responde que ellos sentían que tenían que preservar semillas  de cada especie de acuerdo a su zona de origen, por respeto a la providencia de la madre tierra.
Tras esta sentida conversación, dio lugar al comienzo de la ceremonia acompañada del resonar de los tambores.

Continuamos con nuestro segundo día, al pie de la ladera norte del mítico cerro Uritorco, donde observamos la crisis hídrica que atraviesa la zona y es en este momento donde tomamos real conciencia de la importancia de este escaso recurso y sobre los cuidados que deberíamos tomar para no derrocharla.
Al comienzo de la tarde, realizamos una visita al paraíso, donde pudimos relajarnos y reflexionar sobre todo lo ocurrido hasta ese momento.
Nos esperaba, por sugerencia de Alberto, una visita a la misión Santa Isabel, dirigida por el señor Oscar Acoglanis, hijo de Ángel Cristo.
Las puertas de la misión se abren al público solamente los días sábados por la tarde y hacía allí nos dirigimos, al llegar a la tranquera que da acceso al lugar, sin generarnos expectativas, tocamos la campana que hace las veces de llamador y en ese silencio, mientras aguardábamos, surgieron estas nuevas palabras "el concilio de las almas".
Fue algo que llegó de los diarios escritos por Ángel Cristo Acoglanis en el libro el portero de ERKS de Roberto Villamil (con quién compartimos unas hermosas conversaciones)
Después de haber llevado nuestra palabra y haberla compartido con un grupo de personas, llegados de todos lados y con un elevado nivel de frecuencia vibracional, enriquecidos por dicho intercambio, fuimos invitados a quedarnos a la ceremonia que se realiza en el templo octogonal que se encuentra en la misión, donde se llevaron a cabo varias actividades, dando comienzo con una meditación guiada por Oscar.






Nos enriquecimos en esta experiencia y nos dimos cuenta que las distancias son totalmente relativas, ya que encontramos muchas similitudes con las tareas que desempeñaban dentro del predio y de sus prácticas sanadoras.

Al tercer día de estar en el camping del peregrino, disfrutando de unas noches espectaculares con un cielo completamente prístino y estrellado, acompañados por las luces de ERKS, realizamos una vigilancia del cielo acompañado del sonido de nuestro tambor.

En el último día, recibimos la visita durante la tarde de un grupo de amigos de Alberto entre quienes se encontraban las personas con las cuales habíamos compartido el encuentro en la misión Santa Isabel, entre ellas Marta, discípula de Pedro Romaniuk e integrante del FICI y la escritora Miryam Dietrich con quienes trabamos una animada conversación que resulto gratificante y enriquecedora para todos.





Quedamos invitados a este hermoso lugar y esperamos volver prontamente.